Alfonso de Ezpeleta, hijo de Juan, nació en 1190 y se casó con Doña María de Ozaetu, de noble casa de Vergara (Guipúzcoa). Su hijo mayor, Sanz de Ezpeleta, fue caballero de singular valor y su sello se ve al pie de varios documentos conservados en el Archivo de los Bajos Pirineos. La hija, María de Ezpeleta, fue mujer de Martín, Señor de Esteneaga y Caballero, ambos padres de
Martín Martínez [Ezpeleta], Señor de Esteneaga en 1264, que casó con Doña María de Loyola, de los cuales fue descendiente Íñigo Oñaz de Loyola, quien conocemos hoy como San Ignacio de Loyola (n. aldea vasca Azpeitia, 24.12.1491 - m. Roma, 31.7.1556), fundador de la Compañía de Jesús y el primer general de la orden.Se sabe positivamente que los que pudiéramos llamar Ezpeleta "de pura raza", o sea, los herederos del apellido por línea paterna, terminaron con García Arnoldo de Ezpeleta en el siglo XIV, por haber muerto en la guerra su único hijo varón sin dejar sucesores. La herencia entonces pasó a su hija, Juana de Ezpeleta que, habiéndose casado con Oger de Garro, también de familia francesa, pero establecido en Navarra, sus hijos tomaron el apellido materno en vez del paterno.

No hay comentarios:
Publicar un comentario